El Racing se impuso al Valladolid en un amistoso

REAL VALLADOLID 0-1 RACING





Desde el inicio del duelo quedó patente que el Real Valladolid iba a redundar en la presión asfixiante y en las triangulaciones elaboradas para llegar por las bandas. De esta manera, y en los primeros diez minutos, el conjunto vallisoletano acumuló dos ocasiones que Sesma y Nauzet Alemán no lograron materializar.

El bloque blanquivioleta manejaba el esférico a su antojo y ahogaba al Racing con un fútbol bien hilado, mientras que el conjunto cántabro se encomendaba únicamente a la estrategia a balón parado.

Ficha técnica:

0 - Real Valladolid: Jacobo; Pedro López, Baraja, Nivaldo, Yuri; Nauzet, Carlos Lázaro, Borja, Sesma; Héctor Font y Manucho. También jugaron Aridane, Álvaro Antón y Quique.

1 - Racing de Santander: Coltorti; Pinillos, Torrejón, Moratón, Sepsi; Mehdi Lacen, Colsa, Arana, Munitis, Oscar Serrano; y Juanjo. Tamién jugaron Edu Bedia, Canales, Juan Luis, Luisma, Juan García, Osmar, José Picón, Daniel Álvarez, Geijo, Crespo y Sarmiento.

Gol: 0-1, m. 46: Juanjo.

Árbitro: Piñeiro Crespo (comité asturiano). Amonestó a Pinillos y Serrano, del Rácing de Santander.

Incidencias: Encuentro amistoso disputado en el estadio municipal La Veigona de Luarca (Asturias).

No en vano, esa facilidad para pisar las inmediaciones del área cántabra que lucía con aplomo el Valladolid se fue diluyendo sobre el minuto veinte del partido merced a una mayor aplicación defensiva de la zaga santanderina, cada vez más agresiva en las marcas.

De este modo, el fútbol de toque vallisoletano se trabó y el Rácing se desperezó en posiciones atacantes, incidiendo en las segundas jugadas. En una de éstas, Munitis se quedo solo para encarar a Jacobo desde la frontal. No obstante, su disparo se fue alto.

El tedio que parecía que no iba a llegar en virtud del entusiasmo ofensivo blanquivioleta se instaló cuando se acercaba el descanso debido a las múltiples imprecisiones de ambos equipos. Al Valladolid le empezaba a costar bastante meter esa quinta marcha con la que arrancó el choque.

En la reanudación, el Racing salió en tromba y, en un suspiro, un centro de Juan Luis lo remató de cabeza en el corazón del área Juanjo, aprovechándose de un clamoroso despiste generalizado de los blanquivioletas, y adelantando así a la escuadra cántabra cuando no habían transcurrido ni treinta segundos del segundo período.

Y es que, los canteranos del Rcing de Santander que saltaron al terreno de juego revolucionaron el encuentro y maniataron al Valladolid con mucha mayor presencia que la exhibida en el primer tiempo.

Mientras, el Valladolid anhelaba más pausa y una mayor creatividad, dado que Héctor Font, la referencia desde la media punta, estaba anulado, mientras que el Rácing especulaba con el marcador y mantenía su contundencia e intensidad defensiva, la misma que le hacía un bloque difícil de desarbolar.

Y máxime cuando el conjunto vallisoletano, muy herido tras el tanto, no supo cómo recuperar la manija y finalizó el partido sumergido en una contagiosa apatía.