La última vez que el combinado que hoy dirige el italiano Fabio Capello se enfrentaba al once croata en Wembley durante la campaña clasificatoria para la Eurocopa del 2008 los hombres de Slaven Bilic ganaron por 3-2 y pusieron fin a las esperanzas inglesas. Ahora, si Inglaterra vence en esta ocasión se asegurará su plaza en el Mundial de Suráfrica del 2010. Beckham asegura, sin embargo, que en este partido "no habrá sentimientos de revancha" y afirma que "se trata de dejar en el olvido lo que ocurrió la última vez que jugamos contra ellos".
El ex del Real Madrid sí reconoció a los medios británicos que la afición "probablemente" desee "obtener venganza". "Pero para los jugadores, sabemos que si ganamos, nos clasificaremos para el Mundial y ése ese el incentivo", dijo. El jugador admitió también que aquella noche contra Croacia en noviembre del 2007 fue uno de los peores momentos de su carrera como futbolista y puso fin, además, a la era de Steve McClaren como seleccionador de este equipo con el que no logró la clasificación para el mencionado torneo.
Por contra, Capello aporta "confianza" a la plantilla, según indicó Beckham. "Esta campaña clasificatoria nos ha devuelto la seguridad tanto a la afición como a los jugadores", dijo.
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