Con diez años en la primera plantilla blaugrana, Carlos Puyol puede estar apurando sus últimos meses como jugador del equipo catalán, toda vez que sus dirigentes y la dirección deportiva se están cachodeando de él con el único fin de no renovar a un futbolsta con quien Guardiola no acaba de sintonizar. Además, el hecho de haber defendido siempre con las misma fiereza tanto los colores de la selección española como los del Barcelona no es algo que haya sentado bien en las altas esferas culés.
ARSENAL Y MANCHESTER CITY LE PRETENDEN
Y ante esta situación, varios clubes de la Premier se están frotarse las manos. En concreto el Arsenal y el Manchester City están maniobrando para hacerse con los servicios del defensa la próxima temporada. Los de Arsene Wenger han pensado en el capitán culé para liderar una defensiva que si algo peca precisamente es por carecer la contundencia y experiencia de las que hace gala Puyol. Aunque los jeques árabes del City también se han puesto manos a la obra. En concreto, ante los rumores que apuntan a un posible interés de la candidatura de Sandro Rosell para hacerse con los servicios de Robinho, los de Mark Hughes quieren obtener una opción preferencial para llevarse gratis al zaguero.
JUGAR EN EL MILAN, EL DESEO DEL JUGADOR
Aunque si hay un sitio en el que a Puyol le haría especial ilusión sería en el Milan. Gran admirador de Maldini, a Puyol le encantaría acabar su carrera deportiva en el mismo equipo en que su idolo desarrolló toda una carrera repleta de exitos. Lo que parece claro es que, a la vista de todas estas informaciones, parece que el jugador tiene en su mente cualquier cosa menos jugar en el Barcelona.
GUARDIOLA, EL DETONANTE DE ESTA SITUACIÓN
Y es que el detonante que ha provocado que el zaguero se haya decantado por abandonar el Barcelona ha sido el fichaje de Chygrynskiy por parte de la entidad culé. Un fichaje que fue entendido por Puyol como un ataque hacia su persona, ya que con jugadores como él, Piqué y Márquez había gente de sobra para cubrir esa posición. Pero una vez más los caprichos de un entrenador se van a imponer a la lógica. Y este desafortunado fichaje va a acabar, desgraciadamente para los aficionados blaugrana, con su capitán jugando el año que viene en el Calcio o en la Premier.
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