La esposa de Kuhn, hospitalizada





La esposa del seleccionador de Suiza tuvo que ser hospitalizada la pasada noche debido a un ataque epiléptico. Kuhn tuvo que acompañar a su mujer al hospital, en lugar de acudir con su equipo al campo de entrenamiento. Sin embargo, los pronósticos se muestran optimistas y según los médicos, no corre peligro. Al respecto, Kobi Kuhn dijo que se siente "aliviado ahora que sé que está bajo control, que su vida no corre peligro y que tiene buen pronóstico".

Esa tranquilidad hará que Kuhn siga estando al mando de la selección suiza, ya que, según el propio entrenador, no será impedimento para estar centrado en su trabajo. "Estoy aquí con mi cabeza, estómago y corazón. Seré capaz de hacer mi labor. No lo haría si no estuviera al cien por cien", comentó al respecto.

En lo que respecta a lo estrictamente deportivo, Kuhn reconoció que la imagen dada ante Liechtenstein en el último amistoso previo a la Eurocopa no fue excesivamente buena. Aún así, pidió margen de confianza. "Siempre tenemos problemas cuando somos nosotros quienes tenemos que llevar el peso del partido, pero ahora sólo hay que pensar en el encuentro ante la República Checa y trabajar muy duro los días que nos restan. Estoy seguro de que veremos a un equipo compacto", apuntó el seleccionador suizo.