Pepe, el héroe vaticinado por Postiga





Portugal ha empezado con el mejor pie posible esta Eurocopa 2008 y parte de ese mérito es gracias al partido que realizó Pepe, el defensa del Real Madrid, ante Turquía. Concentrado, inteligente, rápido... esas fueron las facultades que desplegó el defensa portugués en el estadio de Ginebra. Algo que fue fruto de un Pepe inspirado, atento a los detalles que, según él mismo, "marcan la diferencia durante el partido".

Y es que Pepe no se olvidó de la responsabilidad que tenía su selección y, por ende, él mismo para no defraudar a sus aficionados. "Es un sentimiento de responsabilidad que caía sobre mis hombros. Sentí que tenía que defender a todo un país y a toda una nación", afirmó el defensa luso.

Pepe tenía que dar lo mejor de sí mismo y nadie lo sabía mejor que su compañero Hélder Postiga. "Antes de la salida al estadio, Postiga me dijo: no sé porqué, pero siento que vas a marcar algún gol", comentó Pepe. Así fue, en el minuto 17, Pepe vio cumplido el vaticinio de Postiga y corrió hacia el banquillo como un loco para celebrar el tanto con su amigo. Después, se dio cuenta de que el gol había sido anulado. "Fue como si me hubiesen tirado un jarro de agua fría", dijo Pepe. Pero nada estaba perdido, ni la credibilidad de Postiga, el adivino ni la alegría de Pepe.

Ya en la segunda parte, el central del Real Madrid volvió a marcar y, sin anulaciones de por medio, Postiga volvió a acertar. "Este gol fue la mayor alegría que me ha dado Portugal en toda mi vida. Pero espero tener muchas más", concluyó el luso.