11 detenidos tras el Croacia-Turquía





La policía austríaca detuvo en la madrugada de hoy al menos a 11 personas por los disturbios entre aficionados turcos y croatas tras la victoria de la selección de Fatih Terim en los cuartos de final de la Eurocopa, informaron las fuerzas de seguridad.

En el barrio de Ottakring, donde conviven un gran número de personas de ambas comunidades, se produjeron incidentes al increpar y agredir hinchas croatas a los aficionados turcos que celebraban el triunfo de su equipo.

El gran despliegue policial para evitar que ambas aficiones coincidieran en los mismos lugares evitó que la tensión escalara, pero los agentes tuvieron que hacer frente al lanzamiento de botellas y adoquines por parte de algunos hinchas croatas.

Los aficionados violentos del país balcánico también arrojaron piedras contra las ventanas de las viviendas que exhibían banderas turcas y contra los escaparates de tiendas de comerciantes de ese país.

Los disturbios fueron causados por un número reducido de hinchas provenientes de Croacia, y sus propios compatriotas residentes en el barrio les increparon por su actitud violenta.

En otra zona, en el centro de la ciudad, en la conocida como "milla de los aficionados", una zona con pantallas gigantes para seguir los encuentros, fueron los aficionados turcos los que agredieron a un grupo de seguidores croatas tras el primer gol de la selección balcánica.

En ese espacio se registraron varias peleas entre aficionados de ambos equipos con el resultado de varios heridos leves por contusiones, que se refugiaron en los locales destinados a los invitados de honor para ser atendidos por el personal sanitario.

Los servicios sanitarios informaron que trasladaron en total a 25 personas a distintos hospitales, pero los escasos casos graves no se produjeron por los altercados sino por causas naturales como problemas circulatorios, cardíacos y de asma, producidos por la combinación del alcohol con el calor y la aglomeración de personas.

El despliegue de 4.600 policías en un partido considerado de alto riesgo por el gran número de aficionados de ambos equipos que residen en Viena evitó situaciones de mayor violencia.

Por otro lado, los aficionados turcos colapsaron esta madrugada el tráfico en la capital austríaca con sus coches, engalanados con banderas de su país y dando bocinazos para celebrar la victoria de su equipo.

Turquía derrotó a Croacia en los penaltis después de empatar en el último suspiro de la prórroga un tanto de ventaja de la selección balcánica conseguido poco antes.