Las máximas autoridades españolas, en el palco





Los máximos cargos políticos de Alemania, España y Suiza se darán hoy cita en el estadio vienés Ernst Happel para ver la final de la Eurocopa 2008 entre las selecciones de Alemania y España.

De España estarán el rey Juan Carlos, la reina Sofía, la infanta Elena, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, y los secretarios de Estado de Deportes, Jaime Lissavetzky, y de la Presidencia, Bernardino León.

Alemania estará representada por el presidente alemán, Horst Köhler, la canciller federal Angela Merkel, el ministro de Asuntos Exteriores, Franz-Walter Steinmeier, y el ministro del Interior y de Deportes, Wolfgang Schäuble, entre otros. Suiza, país que ha compartido como anfitrión la Eurocopa entre el 7 de junio y hoy, contará con su presidente, Pascal Couchepin y los ministros de Deportes, Samuel Schmid, y Finanzas, Hans-Rudolf Merz, respectivamente.

La reventa no para

Austria tendrá en el palco de honor de la UEFA a su presidente, Heinz Fischer, y al canciller federal, Alfred Gusenbauer, quien por la mañana se reunió con carácter urgente con otros altos cargos para evitar el colapso de la coalición gubernamental de socialdemócratas y conservadores. Los organizadores esperan que esté al completo "la milla de los aficionados" en Viena, que tiene una cabida de unos 70.000 espectadores, y que el estadio vienés Ernst Happel se llene hasta el último de sus 51.428 asientos.

Pese a todos los esfuerzos emprendidos por la UEFA y la policía para impedir la reventa de entradas, varias decenas de revendedores circulaban ayer por el centro de la capital ofreciendo boletos por precios que oscilaban entre los 300 y 1.000 euros, bien por encima del precio oficial de 180 euros. La policía no prevé altercados, pero desplegará más de 3.000 agentes en Viena pare prevenir posibles enfrentamientos después del partido, que comenzará a las 20.45 horas.

Las previsiones meteorológicas son de sol radiante durante el día con temperaturas de 26 a 30 grados y cero posibilidades de precipitaciones, al contrario de pasados partidos, que estuvieron pasados por agua, como el España-Rusia (3-0) del jueves, día 26.