Dice la Real Academia de la Lengua Española: "Máxima sanción que se aplica a ciertas faltas del juego cometidas por un equipo dentro de su área". Y precisamente el único penalti que no debió pitarse fue el del Real Madrid, clamorosamente fuera del área. De los del Barça, uno más claro que el otro. Pero Messi también mete penaltis, por cierto, para los que defendían que meterla desde el punto de cal es cosa de niños. Parece mentira que el Madrid le enchufe tres goles al Barça en el Bernabéu y acabe perdiendo el partido. Sin duda de eso tienen culpa muchos, pero permítanme que apunte a uno de ellos. No tanto por el penalti absurdo que cometió, ni por su enésima expulsión de las que ya perdí la cuenta, sino porque un jugador de su talla, importancia y peso en este equipo no puede tirar por la borda un partido vital incurriendo en errores de principiante. Decía Ramos estos días en una entrevista que al principio de temporada no estaba mentalizado al cien por cien. ¿Y ahora?
¿Y Ancelotti? Algunos llevamos tiempo diciendo que este Madrid no ha ganado ninguno de los partidos importantes en esta Liga: dos derrotas contra el Barcelona, otra contra el Atleti y un mísero empate que pudo acabar peor. ¿Este es el equipo que aspira a ganar la Décima, la Liga y la final de Copa al Barça? Espero que a la quinta vaya la vencida y Ancelotti esté guardando cartuchos para cuando vengan los partidos más importantes del año. Además se dio cuenta rápidamente el italiano en rueda de prensa y empezó su discurso precisamente haciendo alusión a dichas derrotas. Confiaré en el amigo Carletto, no nos queda otra. Pero yo empiezo a estar cansado de perder los partidos importantes. Aunque ganemos esta Liga, lo habremos hecho sin autoridad y sin golpes encima de la mesa. El título valdrá igual, ¿O no?
Y en Can Barça hoy todo son alegrías, como si los problemas reales no existieran. Soy de los que piensan que la caída del Barça será todavía más dura. Mientras Martino saca pecho en la gestión de su grupo, como si su dedo divino hubiese sido el artífice de dicha gesta. Me alegro por Iniesta, por cierto, magistral como siempre, esperemos que llegue al Mundial con la misma frescura. Lo necesitaremos. ¿Y de Neymar? Justito ¿Y de Bale? Se le espera. Parece mentira que los dos mejores equipos del mundo se gasten cien quilos cada uno -eso dice la Audiencia Nacional española- y el partido lo acaben resolviendo los de siempre. Cosas del fútbol.
Esta mañana, sin embargo, ustedes y yo nos levantamos como siempre, desayunamos y nos vamos a trabajar. El follón dura unos días y luego se olvida hasta que vuelve a pitar el árbitro el principio del próximo encuentro. No pierdan un minuto en lamentarse, no merece la pena. Ya lo dijo el maestro Julio Iglesias: "La vida sigue igual". Créanme.
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