En los cuatro partidos, porque también disputó los 90 minutos ante el Ludogorets, Varane cerró la boca de los que dudaron de su calidad por algún fallo puntual ante el Atlético de Madrid. Su sobriedad defensiva no sorprendió a nadie porque todos conocíamos lo que podía dar como demostró en temporadas anteriores. Casualidad o no, el galo entró en el día de la redención blanca en la Coruña, y desde entonces, todo son victorias.
Junto a Sergio Ramos, comprenden una dupla prácticamente indestructible a poco que haya un poco de orden general a su alrededor. Con ellos por delante de Casillas, los blancos no han cedido ningún punto tras el mal arranque. No es desmerecer a Pepe, un futbolista que sigue manteniendo un nivel ‘top’ con la camiseta merengue, pero la proyección del ojito derecho de Zidane se merece completarla con minutos, además de hacerlo ya en el talonario con su renovación.
Sin embargo, Ancelotti volvió a la dupla clásica con Pepe ante el Athletic, asegurando que no tiene centrales titulares y que, creo que no hay discusión aquí, el Madrid posee el mejor grupo de centrales del mundo. En una nueva casualidad o no, o es que lo quiere el destino, el día que volvió Pepe, cayó Ramos, y con ello, otros 45 minutos cómodos de Varane en la zaga madridista, si bien los vascos se ausentaron del césped prácticamente.
A diferencia de la lesión del primero, la del de Camas ha llegado en descanso por compromisos internacionales, donde tendremos a Varane de titular con la absoluta del gallo. Cuando se vuelvan a reunir en Valdevebas se preparará el partido ante el Levante con Varane y Pepe de titulares.
La idea del club es probar a Sergio el día 22 ante el Liverpool, para que llegue en perfectas condiciones al clásico del 25, pero hete aquí que ante los blaugranas Varane jugó el mejor partido en su corta carrera deportiva y en el momento más importante. Manteniendo a raya a Messi, el central completó su partidazo con un golazo de cabeza que puso a sus pies al Bernabéu.
Rápido, técnico, y sobre todo, extraordinariamente talentoso, Varane se ha ganado a pulso con paciencia, trabajo, humildad y resultados en el campo, el ascenso a titular indiscutible en el Real Madrid. Con Ramos o con Pepe, pero con él. A sus 21 años, estamos ante un futbolista que puede, debe y, si le dejan, en el Madrid, marcar su propia época y leyenda. El destino lo pide a gritos esta temporada Carlo.
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