Como bien dijo Isco entre semana, el Real Madrid “necesita recuperar las mejores sensaciones”. Esas que le llevaron allá por los meses de octubre, noviembre y diciembre a ser el mejor equipo de Europa. Más allá de los resultados, los de Ancelotti desplegaban un fútbol espectacular, combinativo, rápido y goleador. Todo ello se ha perdido en el último mes de competición pero, desde hoy, toca avivar de nuevo el fuego del fútbol. Con fútbol llegarán de nuevo las goleadas y los partidos placenteros, porque a 'pegada' nadie puede ganarle a este Madrid de Ancelotti.
El cansancio no puede ser una excusa; el Real Madrid lleva dos semanas entrenando durante toda la semana; la eliminación de la Copa le ha dejado el camino despejado en cinco las próximas 8 semanas. Habrá tiempo para entrenar, para ensayar nuevos conceptos tácticos, para recuperar el fuelle físico. Será fundamental comenzar a demostrar la mejoría desde hoy para meter miedo a Sevilla y Atlético de Madrid.
Y es que, el encuentro del Vicente Calderón marcará un antes y un después; a nivel clasificatorio, una victoria permitiría descartar al Atlético de la lucha por el título y a nivel moral, los blancos se quitarían de encima la losa de no haber vencido a los rojiblancos ni una sola vez esta temporada en cinco encuentros.
Probablemente, la sanción a Cristiano Ronaldo, la vuelta al 4-4-2, la motivación por salir del atolladero y el hecho de jugar en casa, ayudará a los de Carlo Ancelotti a cambiar radicalmente la pésima imagen ofrecida en el Arcángel ante el Córdoba. Todo debe cambiar desde ya. La Real Sociedad tiene que pagar los platos ‘rotos’.
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