El Madrid empieza a invertir en el éxito del mañana

"El Madrid se ha dado cuenta que probablemente sea mejor fichar a diez grandes promesas por 3 millones de euros cada una que a un gran jugador por 30 millones de euros"


cuandonohaya

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No se puede negar que hasta hace un par de años la cantera del Real Madrid ha pintado bastante poco a la hora de confeccionar la primera plantilla. La filosofía del club en las últimas temporadas ha sido más la de buscar fuera jugadores que podían dar un rendimiento inmediato que intentar encontrar en Valdebebas a futbolistas que necesitaban paciencia y tiempo para explotar. Era una política que se resumía en gastar grandes cantidades de dinero por nombres puntuales mientras que los mejores jugadores del Castilla se dispersaban por toda la geografía europea ante la falta de oportunidades en el equipo más exigente del planeta.

Pavón, Raúl Bravo, Miñambres, Palanca, Balboa, Negredo, Jurado, Soldado, Borja Valero, Callejón... son jugadores que llegaron, pero no se quedaron. Todos ellos tuvieron que buscarse las oportunidades fuera y la mayoría acabaron demostrando que tenían un nivel adecuado para estar en equipos importantes. Por eso hoy la 'Fábrica' sigue siendo una de las dos o tres canteras más productivas del fútbol mundial, aunque realmente eso al Real Madrid no le ha dado muchos réditos al no poder nutrirse de ellos.

Así pues, el Madrid ha cometido errores en su política de cantera, aunque en su defensa hay que decir que sus últimos 15 años han sido muy convulsos. Se podría decir que demasiado, pues en este tiempo no se han ganado muchos títulos y el juego del equipo no ha sido brillante salvo épocas puntuales. Algo que ha sido todavía más difícil de llevar si se tiene en cuenta que mientras tanto el Barcelona lograba casi del 'tirón' tres de sus cuatro copas de Europa, además de otros muchos logros. Por eso es comprensible que el Madrid no tuviera ni tiempo ni paciencia para arriesgar con sus jugadores jóvenes y prefiriera tirar de chequera en su ansiedad por lograr resultados inmediatos.

En consecuencia, el Madrid se ha dado cuenta que probablemente sea mejor fichar a diez grandes promesas por 3 millones de euros cada una que a un gran jugador por 30 millones de euros. Porque a poco que dos o tres de esos jóvenes jugadores le salgan bien se amortizará con seguridad el total invertido. Así que este está siendo el camino a seguir con jugadores como Abner, Peeters, Asensio u Odegaard. En el club se han propuesto que varios de los mejores futbolistas sub'21 del mundo sean del Real Madrid y en ello está. Se ha pasado de fichar a los Balones de Oro a querer fabricarlos y esa es una estrategia que por sí sola llena de ilusión a la afición.Pero esta época ya ha acabado. La 'Décima' ha traído estabilidad y tranquilidad. Ya no ha prisas ni precipitación, pues por fin hay un proyecto y una base ganadora. El club ha dado con la tecla y ha abierto los ojos. En Concha Espina se han dado cuenta de que la juventud es el camino y que se puede conjugar en una sola esa doble política de 'Zidanes y Pavones' de la que tanto hablaba el presidente la década pasada. Ahora la nueva estrategia es traer 'cracks' jóvenes para formarlos en la mejor Ciudad Deportiva del mundo y, después, en función de cada caso, cederlos a otros clubes o directamente aprovecharlos para el primer equipo.

Por eso es inevitable no pensar que las cosas se están empezando a hacer mejor que bien. No hay más que ver la primera plantilla del equipo blanco para darse cuenta de que es una de las mejores de su historia y de que está plagada de jugadores jóvenes. Kroos, Varane, Carvajal, Marcelo, Lucas Silva, Jesé, Bale, Isco o Benzema garantizan un mínimo de 5 años - y en algunos casos de 10 - de gran rendimiento. Todos son grandes representantes de su generación, aunque el Madrid no se conforma con ello y ya trabaja en la siguiente.

Al club le ha costado mucho tiempo regresar a la cima del fútbol mundial, así que es lógico que ahora ya no quiera volver a abandonarla. Y qué mejor que asentar los cimientos de su trono contratando ya a las mejores estrellas del futuro. Porque si estos jugadores salen mal siempre habrá tiempo para traspasarlos para recuperar almenos la inversión inicial, pero si salen bien el fútbol mundial promete ser blanco durante un ciclo muy largo. De manera que no deja de ser una apuesta acertada y  perfectamente asumible, ya que las opciones de éxito son muy elevadas y el riesgo existente es prácticamente nulo.