El Schalke, un 'balón de oxígeno' en el momento justo

"Ahora mismo el Madrid no está para alharacas ni para un fútbol brillante. Su misión es sacar adelante los partidos a la espera de que sus futbolistas superen el bache físico y recuperen el tono"


cuandonohaya

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La lectura positiva que se puede sacar de esta victoria europea se resume en tiempo. Porque es lo que realmente ganó el Real Madrid contra el Schalke. A falta de buen juego buenas son siempre las victorias, así que al menos se cumplió con el expediente y casi se dejó finiquitado el pase a los octavos de final. Tras seis años tropezando sin parar en esta ronda el madridismo ha vuelto a acostumbrarse a jugar los cuartos - de conseguirlo esta vez sería la quinta temporada consecutiva-, por lo que se puede decir que el equipo va a cumplir una vez más con el mínimo que se le puede exigir en Europa.

Más allá de ello es evidente que el juego que hizo el equipo en Alemania no le puede dar para ganar la Champions. Enfrente estuvo un rival menor, un equipo que en la Bundesliga se mantiene con cierta solvencia en el cuarto puesto, pero que en España probablemente no pasaría de la parte media de la tabla. Esto no quiere decir que sea un mal equipo, solo que es un conjunto inferior al Madrid y uno de los rivales más asequibles de los 15 posibles que había en el bombo de la competición. Así que en este sentido el Madrid puede sentirse satisfecho, porque la suerte le ha dado algo de 'oxígeno' precisamente cuando más lo necesitaba.

Así que el triunfo ante el Schalke ha permitido que el equipo blanco gane dos meses de tiempo en plena marejada. Ahora mismo el Madrid no está para alharacas ni para bun fútbol brillante. Su misión es sacar adelante los partidos a la espera de que sus futbolistas superen el bache físico y recuperen el tono que mostraron hasta el Mundial de Clubes. Y bajo este contexto tener prácticamente solucionada la Champions hasta mediados de abril suena casi a 'bendición', pues permitirá centrarse en estas semanas en no aflojar en la Liga, donde el próximo 22 de marzo espera el Barcelona. Es el momento de apretar fuerte por en el campeonato casero y afianzar la ventaja que ya se tiene, de forma que el equipo pueda afrontar los dos últimos meses con la cabeza y las piernas lo suficientemente frías para conseguir un doblete que sería histórico.Hay que tener en cuenta que este año la final de la Champions no se juega hasta el 6 de junio, por lo que la disputa de los cuartos de final se 'retrasa' hasta el 14/15 y 21/22 de abril. Así que todavía quedan casi dos meses hasta que el equipo blanco empiece a afrontar los partidos 'de verdad' de esta competición. Es tiempo más que suficiente para que los cinco lesionados que quedan en la enfermería - Khedira, Coentrao, Ramos, Modric y James Rodríguez - estén perfectamente listos. Lógicamente habrá que tocar madera en estas semanas, pero si todo va bien el Real Madrid podrá afrontar las decisivas rondas del torneo con prácticamente toda su plantilla al completo.