Pero para lograrlo no solamente hará falta pasión, garra y madridismo, también se necesitará una buena dosis de fútbol. Esa que debe quedar en los pies de futbolistas como James, Isco, Kroos y Asier Illarramendi. Porque sí, el vasco debe ser el recambio de Luka Modric. La afición está harta de experimentos. No quiere a Khedira, ni siquiera a Lucas Silva. Ancelotti debe ser justo y apostar por los futbolistas que han trabajado en silencio durante toda la temporada para ganarse esta oportunidad.
No hay duda que el Santiago Bernabéu será un ‘hervidero’, un estadio que apretará como nunca para lograr que el Madrid marque el 1-0 casi sin darse cuenta. Enfrente, un equipo que ya ha demostrado en muchas ocasiones, que es especialista en situaciones límite. Cuando parece ‘muerto’, es capaz de rearmarse y levantarse las veces que sean necesarias. Por eso, para estar en semifinales hará falta mucha paciencia, tesón y, ante todo, fútbol, mucho fútbol. El Real Madrid está obligado a demostrar quién es el campeón de Europa. Sin excusas, sin apelar a las bajas ¡Adelante, Real!
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