...y en el camino nos encontraremos





El técnico culé ha sido de los pocos que no se ha mojado sobre los colegiados en lo que va de temporada, porque desde que Mijatovic abrió la veda, ha sido imposible cerrarla. Tras una serie de partidos en los que el Madrid salió objetivamente perjudicado por las decisiones arbitrales, el director deportivo madridista (azuzado por algunos cargos más altos que el suyo) se vio cuasi obligado a levantar la voz para hacerse valer.

En aquel momento, medios de comunicación, presidentes, entrenadores y jugadores de la Liga española se lanzaron al cuello del montenegrino de forma unánime. Todos ellos se erigieron entonces en los defensores de la humanidad y la imparcialidad de los árbitros… pero apenas unos meses más tarde, todos (o prácticamente todos) han sido víctimas de sus palabras, desde Osasuna hasta el Valencia.

Pero el capítulo más sangrante no lo ha firmado precisamente el osasunista Patxi Izco (que llevaba muchos votos para ello tras abandonar el palco del Bernabéu), porque Vicente Soriano se lleva la palma en esa esperpéntica secuencia grabada en la que se queja al mismísimo Sánchez Arminio de los fallos arbitrales. Ahora, ¿con qué cara puede Emery volver a decirle a Mijatovic y al madridismo con la boca grande que nadie debe quejarse de los árbitros como anunció a los siete vientos? Y es que ya lo apuntaba el sabio de Pep: arrieros somos…