La columna 2010 … ¿De Juande?





El proyecto deportivo del equipo blanco está bien estructurado, aunque con matices. Se necesita una estrella mediática, de las que levanten este verano a todo aficionado (de eso se encargará Florentino) y un par de refuerzos que aseguren continuidad, limpieza de viejas glorias y un vestuario con hambre. Este optimismo no es desmesurado aunque tiene un claro exponente y una persona que ha sido clave de cara a mantener el ánimo y a gozar de una mayor serenidad para pensar en futuras gestas. Ese no se ha escondido, ha jugado sus bazas desde la rentabilidad sin brillantez y merece un respeto eterno. Juande Ramos es el gran fichaje y la última (quizás la única) buena decisión de Ramón Calderón.

Sus resultados son históricos, no admiten comparación y aunque su fútbol e imagen están lejos de ser las anheladas en el madridismo más acérrrimo, nadie puede discutirle. Por eso, a su manera, ha ido planificando un Real Madrid atractivo de cara al año próximo y su columna vertebral ya está más que definida a falta, desde luego, de algún refuerzo de campanillas. Casillas, Pepe (más allá de su sanción), Lass, Robben e Higuaín son intocables para su esquema y acompañados de Ramos, Marcelo o Huntelaar, logran un vestuario lleno de juventud, esperanza y mucha unión.

Florentino debe hacer el resto. Sus primeros pasos serán traer a un crack mundial (Cristiano) o dos (Kaká y Benzema), dar alternativas en las bandas, reforzar la pareja de centrales y un creador de jerarquía pero, sobre todo tendrá que decidir si Juande, el que le puede dar la Liga y el que ha mantenido el castillo a salvo, merece su continuidad. ¿Juande en 2010?