Joan Plaza, la injusticia hecha entrenador





No seré yo el que salga en defensa de Joan Plaza. Tras escucharle detenidamente en la entrevista que concedió en exclusiva a Defensa Central, sólo puedo decir que es un hombre agradecido. Algo parecido a los Luís Enrique, Robinho, Sneijder o Robben. Todos ellos cortados por el mismo patrón. Plaza se fue sin una mala palabra hacia aquellos que le echaron del Madrid (tenía un año más de contrato). Y no sólo eso, sino que habla de Madrid y del Real Madrid como si de su casa se tratara. Lo que demuestra que, además de gran profesional (aunque algunos le fusilaran a la mínima), Joan Plaza destaca por ser una gran persona.

No quiero ni pensar que hubiera pasado hace un año si el Madrid de Plaza hubiera perdido de 20 con el Barcelona, algo que ha sucedido esta temporada. Le hubieran quemado vivo. Y eso con una plantilla corta y, por qué no decirlo, bastante mala. Sólo hay que ver dónde han acabado los Raúl López, Mumbrú, Tomas, Massey, Winston y compañía. No se quejó nunca, a pesar de que trabajó con lo que le proporcionaban los de arriba. Sólo pidió un fichaje, el del pivot Mike Batiste. La respuesta, como pudo comprobarse, fue la que fue. Simplemente por curiosidad, me hubiera gustado haberle visto con plenos poderes en la confección de la plantilla y con los jugadores que, verdaderamente, él quería. Igual más de uno se hubiera llevado una sorpresa. Tal vez los mismos listillos que decían que bajaría al Cajasol a LEB Oro en la jornada 6. De momento le ha metido en la Copa del Rey. A lo mejor es que no es tan malo cómo algunos vendían.

PD: Un saludo muy grande para Nestor Torres y Derik Osede. La defensa del juvenil B del Madrid ya está deseando que vuelvan a unirse a ellos.