¿Qué pasa con el baloncesto?

"Florentino Pérez y los responsables del basket blanco no se pueden dormir"


cuandonohaya

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Ante esta situación se requieren cambios profundos que sitúen al baloncesto madridista en el lugar que merece. ¿ Quién debe seguir?¿Qué entrenador es el más adecuado? Florentino Pérez y los responsables del basket blanco no se pueden dormir. De una vez por todas deben darse cuenta de que el deporte de la canasta puede dejar de ser un lastre para convertirse en una fuente de títulos para el Real Madrid.

Hagamos un pequeño repaso de la andadura de cada uno de los integrantes de la plantilla madridista en este negra temporada que acaba de finalizar.

Llull. Se ha confirmado como el auténtico líder del equipo.  Debe seguir en esta línea, pero sin olvidarse de repartir la bola cuando tenga mejor compañía en el perímetro. MVP del equipo en la postemporada.

Prigioni. No debe continuar porque ya no está para jugar al máximo nivel. Se le ha pasado el arroz y se ha enfrascado en absurdas polémicas que lo único que aportan es dinamita al vestuario.


Sergio Rodríguez. Debe seguir, pero siempre que recupere la mejor versión de sí mismo. Esa que sólo se ha visto con cuentagotas y que es capaz de revolucionar cualquier encuentro. Aún así tiene que seguir siendo el segundo base del equipo, por detrás de un fichaje estrella tipo Pargo, McCaleb  o Teodosic

Tucker Lamentable temporada del escolta norteamericano que se suponía iba a sustituir a Louis Bullock... Sin acierto. No supo ni buscarse sus propios tiros ni aprovechar los que sus compañeros le buscaban. No hace falta decir donde debe estar su destino. Su sustituto parece que será Jaycee Carroll y no lo tendrá muy complicado para elevar el listón. No estaría mal fichar otro escolta para que Llull pasara a ser el tercer base.

Suárez. Temporada correcta para el madrileño. Puede y debe aportar mucho más desde el perímetro y en posiciones interiores. La afición tiene esperanzas en él.  Se podría intentar el fichaje de un alero alto y físico para darle descansos. Pete Mickeal si está plenamente recuperado puede ser una buena opción, aunque su pasado culé puede marcarle si rinde mal.

Vidal. Prácticamente inédito esta campaña. Tiene que marcharse.

Velickovic. Sigo sin entender el ostracismo al que han sometido tanto Messina como Molin a este jugador que en el puesto de ala-pivot puede ser aprovechable. Que se quede sólo si el nuevo técnico lo ve comprometido.

Mirotic. La grata sorpresa del  año. Ha tirado del equipo con sólo 20 años en más de una ocasión. Futuro ‘crack’ del basket madridista si continúa progresando. Se le podría haber pedido más en la Final Four y en las semis de la ACB, pero su juventud y los pocos minutos que le concedió Molin, encogieron su muñeca.

Felipe Reyes. El capitán, siempre dispuesto a tirar del carro. Encomiable su trabajo en la Final Four certificado con un ‘doble-doble’ ante el Maccabi. Tiene que olvidarse de disputas y polémicas en el vestuario y asumir su rol de líder espiritual del Real Madrid.

Begic. Vino para ser un pivot intimidador y no ha sido absolutamente nada. No se entiende el porqué de su fichaje. Su lugar lo debe ocupar un pivot que apuntale la plantilla. Kaun podría ser una incorporación interesante.

Tomic. Debe confirmarse como un ‘center’ dominante en Europa,ganar dureza y capacidad de liderazgo para echarse el equipo a sus espaldas si es necesario. Es su última oportunidad para ser estrella.

Fischer. Buena aportación de este pivot defensivo. Sus tapones serán clave, aunque debe centrarse en momentos complicados.

Dejamos para el final a los que deben abandonar la sección cuanto antes. Se trata de Juan Carlos Sánchez y Alberto Herreros, responsables del baloncesto madridista, que en ningún momento han estado a la altura de la entidad que representan. Su nula gestión del ‘asunto Messina’ les dejó en evidencia. Ahora, otros dirigentes deben relevarles.