Sólo con ver el estado de forma de jugadores como Piqué o Busquets me doy cuenta de que el Barcelona llega a este partido con lo justo. Jamás había visto al defensa tan lento como en el partido que jugó con España el pasado miércoles ni a Busquets tan ‘suavecito’ en el cuerpo a cuerpo con los delanteros rivales como se le notó ante Balotelli. Se ve que el Barcelona llega muy justo, su pretemporada ha sido más corta y eso se tiene que notar en el campo. Máxime cuando se ve que los jugadores del Madrid están más rápidos, con más chispa y más dinámicos.
Repito, sobre el césped puede pasar cualquier cosa pero, a día de hoy, veo al Madrid infinitamente superior al Barcelona físicamente hablando y eso es un hándicap a favor para los de Mourinho y en contra para los de Guardiola. Tan importante como que, bajo mi punto de vista, la eliminatoria está 60-40 a favor del Real Madrid. Estoy seguro que Mourinho, aunque no lo reconozca abiertamente, sabe que su equipo está varios peldaños por encima de los culés y lo va a querer aprovechar desde el primer minuto ¿Cómo? Presión arriba y constante, pelea por cada pelota dividida y, sobre todo, nada de trivote. Tres hombres arriba bien marcados para decirle al Barcelona, desde el papel de la alineación, que el Madrid no juega la ‘Supertrola’ sino la Supercopa de España.
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