Casillas, un merecido tributo

"La guinda perfecta a una vida bajo los palos debería ser el Balón de Oro"


Iker Casillas




Hace doce años, dos meses y tres días, la leyenda de Iker Casillas comenzaba a escribirse en el libro blanco del Real Madrid. Un joven muchacho de 17 años veía como su sueño se hacía realidad al partir como titular ante el Athletic de Bilbao en La Catedral para suplir las bajas de Illgner y Bizarri. Benjamin Toshack le otorgaba una responsabilidad importantísima, defender el marco madridista, y desde entonces su leyenda se ha hecho oro.

Casillas se ha convertido en un pilar fundamental del Real Madrid y de la selección española de la última década. ‘El Santo’, ese portero voraz que con sus dedos llega a balones imposibles y que no se amedranta ante nada, se ha hecho un hueco en el corazón de millones de aficionados del club blanco y del combinado nacional. Fiel a un sentimiento, la racionalidad, madurez, templanza y seguridad son algunos de los adjetivos que se me ocurren al dibujar la figura de Iker.

Al cancerbero blanco nadie le ha regalado nada, su trabajo, esfuerzo y sacrificio se ha visto recompensado en todos estos años con títulos y galardones colectivos, pero más allá de eso, creo que la guinda perfecta a una vida bajo los palos debería ser el Balón de Oro. Los aficionados madridistas y los españoles en general, debemos de estar agradecidos al guardameta por ser ese ángel que en los momentos de infarto sabes que no te va a fallar, siempre estará él para sacar un mano a mano a Robben en la final de un Mundial o realizar acrobacias en el césped de Hampden Park que te brinden una Copa de Europa.

Entiendo que es complicado que un cancerbero se lleve un galardón como el Balón de Oro, ya sé cómo funcionan ese tipo de premios, pero si la gente que tiene poder de decisión comprueba los méritos y actuaciones de Casillas deberían de ser consecuentes. El meta merengue, que a sus 30 años de edad se encuentra posiblemente en el mejor momento de su carrera, ha sido elegido como el Mejor Portero del Mundo en los últimos tres años según la Federación de Historia y Estadística del Fútbol, recibió el Guante de Oro del pasado Mundial y ha sido nombrado tres veces por la FIFPro como el Mejor cancerbero del mundo.


Pero a Iker Casillas no se le limitar solo a sus méritos dentro de los terrenos de juego, porque más allá de eso, el capitán es un líder nato, un futbolista de los que hace vestuario y que con sus buenos actos engrandece aún más su figura. Así, con todo, a pesar de que en mi opinión le falte ese galardón que ponga broche a una carrera llena de triunfos –y los que le quedan-, desde aquí, mi más sincero tributo a un futbolista único. Gracias Iker.

Puedes seguir a Christian Díez en Twitter: @christiandiez

Puedes seguir a Defensa Central en Twitter: @defcentral