Como ya me he aburrido esta temporada de ver a equipos de medio pelo por el Bernabéu en la Champions: Ajax, Zagreb o CSKA, incluso el Lyon, que es una sombra de lo que fue hace no mucho tiempo, me voy a tirar a la piscina pidiendo que toque el Bayern de Múnich. Los alemanes, según los entendidos, son el tercer equipo con más posibilidades de ganar este año la Champions tras Madrid y Barcelona. Sería un partidazo por todo lo alto y, sobre todo, una buenísima forma de medir en qué momento se encuentra el Real Madrid. Escuchar un Bayern-Real Madrid en Copa de Europa es hablar de un partido mítico. Estoy seguro que si saliera este emparejamiento el club no iba a necesitar vídeos motivadores ni nada por el estilo para que la gente vaya al campo. Es cuestión de feeling. También estoy convencido de que el Bernabéu se transformaría en un partido como ese, se vestiría de jugador número 12.
Nadie sabe lo que podría pasar en ese enfrentamiento entre los blancos y los alemanes. Eso sí, como aficionado creo que al Real Madrid le vendría de perlas. Hace no demasiado tiempo, los blancos ganaron Champions dejando en la cuneta a equipos como el Manchester, el Barcelona o el propio Bayern. Por eso soy de la opinión que si a los de Mourinho les toca el Bayern los que deben preocuparse son los alemanes. Además, el morbo de ver a Robben o Ribery como rivales en el Bernabéu es un aliciente más que interesante. Uno que fue madridista y otro que estuvo cerca. Sólo de pensarlo dan ganas de comprar la entrada ¿Y el Barcelona? Me apunto sin problemas a que se celebre una final entre españoles en Múnich. La última entre ambos no le fue nada mal a los blancos.
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