Si uno mira las estadísticas de visitas a Münich dan ganas de no ver el partido; sólo un 1 empate en 9 visitas al estadio bávaro. El estadio del Bayern nunca se le ha dado bien al equipo madridista. Pero como bien dice Mourinho, los números no valen para nada. Poco importa si en las anteriores visitas, el Real Madrid no dió la cara, si encajó 22 goles en 9 visitas o si sólo fue capaz de perforar la meta germana en 9 ocasiones.
Hoy lo único que importa, es que el Real Madrid salga a comerse al Bayern, a demostrar desde el primer minuto que quiere dar un golpe en la mesa y encarrilar casi de manera definitiva la eliminatoria antes de llegar al Santiago Bernabéu.
No debería el Madrid conceder la oportunidad al Bayern de dominar la eliminatoria. Si el Madrid sale al 100%, con la línea defensiva en el mediocampo y presionando la salida de pelota germana, apuesten a que el Madrid puede hacer más de un gol en el Allianz Arena.
Eso sí, si el entrenador madridista decide sacar su lado más conservador y renuncia a jugar como lo lleva haciendo toda la temporada, el Real Madrid puede tener graves problemas. El madridismo no quiere trivotes ni un equipo que salga a no perder, quiere un equipo que demuestre que está preparado para reinar en Europa.
Es el día y el partido en el que se va a empezar a ganar la liga de campeones y la liga. Un gran resultado unido a una gran imagen del Madrid, pondrán en alerta, a un ya de por sí presionado Barcelona, de cara al partido del sábado. Hoy toca revertir la historia en suelo muniqués, toca empezar a soñar con la ansiada décima copa de Europa. Empieza la semana de pasión.
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