José Mourinho es el mejor entrenador del mundo y debe estar en el mejor equipo del mundo. Es el que ha llevado de nuevo a su sitio al Real Madrid, a luchar y competir por todas las competiciones, a alcanzar siempre, como mínimo, los cuartos de final de la Liga de Campeones. Reconozco que Mourinho no es perfecto, que muchas veces le pierden las formas y que ha cometido errores, como todos.
Iker Casillas es el mejor portero del mundo y, lógicamente, debe estar en el Real Madrid. Gracias a él se han conseguido títulos y ha decidido partidos con sus paradas milagrosas. Pero también hay que reconocer que en ocasiones se ha equivocado y, más allá del rendimiento deportivo, es el buque insignia del club y como tal, debe serlo hasta que se retire.
Sergio Ramos es el mejor central del mundo y, quizá también el mejor lateral y por eso su hábitat natural es el Real Madrid. Con él, el equipo siempre ha sido consistente y ha contribuido siempre de manera decisiva en las victorias del Real Madrid. Como Mourinho y Casillas, Ramos también se ha equivocado en alguna ocasión.
Sin embargo, el Real Madrid será menos sin cualquiera de ellos y por eso apuesto por un Real Madrid de futuro que cuente con Mourinho, Casillas y Sergio Ramos. Muchos dicen que eso es imposible porque se llevan a matar pero, como en todas las familias siempre ha habido roces. Eso no debe obligar a las familias a separarse. Debe servir para que cada uno aporte su granito de arena y puedan convivir de la mejor manera para que el mayor beneficiado sea el club.
No quiero que acaben las discusiones porque los puntos de vista enfrentados ayudan a mejorar, si todos pensaran igual serían borregos que se acabarían dejando manipular por el pastor. Ese pastor es la prensa que intenta acabar con el club y que quiere manipularlo a su antojo, haciendo y deshaciendo sólo por su propio beneficio.
Eso no se puede consentir. Mourinho, Casillas y Ramos no deben consentir que esa gente quiera manipular al Real Madrid. El Real Madrid debe estar por encima de todos ellos, y el entrenador, el portero y el defensa, deben ser los primeros que defiendan al club y se haga lo que sus verdaderos dueños, los socios, desean. Y lo que desean es un Real Madrid unido, compacto, fuerte, en el que se pueda debatir, en el que se luche por el bien común hasta el final... ¡Vamos Real!
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