La prensa alemana no se ha tomado bien las rotaciones de José Mourinho en la mediapunta. En el país germano se ve la recuperación de Kaká como una amenaza para la evolución de Özil y, en consecuencia, para los intereses de la Selección de Alemania. Por ello han comenzado una campaña de ataques hacia la nueva política del técnico portugués, cuestionando su decisión de dejar fuera a Özil frente a Málaga y Villarreal.
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