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El portugués acumula ya dos semanas de baja después de que el pasado 2 de abril cayera lesionado en el choque de ida ante el Borussia de Dortmund. A partir de entonces sus problemas se fueron multiplicando, ya que primero se habló de una tendinitis rotuliana en su rodilla izquierda y posteriormente nuevas pruebas dictaminaron que también padecía una microrrotura fibrilar. Ante ello no le quedó más remedio que parar y perderse dos de los partidos más importantes de la temporada para el equipo, el de la vuelta en Dortmund y la final de Copa del Rey. Pero por suerte sus compañeros cumplieron en ambos y su ausencia no se ha traducido en grandes problemas, por lo que ahora su gran objetivo es estar el miércoles en el partidazo ante el equipo de Guardiola.
A día de hoy Cristiano Ronaldo está bastante confiado en poder jugar el citado encuentro como titular. El pasado miércoles comentó en Mestalla para las cámaras de TVE que ya no sentía molestias, por lo que sus problemas musculares están casi cicatrizados. Más problemática es su tendinitis rotuliana, aunque las molestias han remitido algo con el descanso de los últimos 17 días. Por lo tanto, el futbolista empieza a visualizar el partido de semifinales de Champions ante el Bayern. Los médicos le piden cierta prudencia todavía, pero él no duda de que apretará lo que sea necesario para no perderse el duelo clave. Sabe que el madridismo le necesita y él está decidido a no defraudar a la afición.
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