Con los futbolistas disgustados en el Real Madrid, Florentino Pérez no tiene duda en abrirles la puerta, eso sí, como todo buen empresario, a buen precio. Eso han sido los casos en el último año de Higuaín, Ozil y Di María, por los que el máximo mandatario madridista ha logrado unos beneficios de 100 millones de euros.
Gonzalo Higuaín abandonó el Real Madrid, con dirección Nápoles, después de pedir el traspaso porque no se sentía lo suficientemente valorado. Los ingresos de la entidad de Chamartín por su venta fueron de 40 millones de euros, por los 12 que costó su contratación. Algo similar fue el caso de Mesut Ozil que otorgó un beneficio de 32 millones al comprarlo por 18 y venderlo por 50.
El reciente caso de Ángel Di María es el que más dinero ha dejado en las arcas madridistas. Contando con los 75 millones por la venta al United, el Real Madrid ha obtenido un superávit de 40 millones, después de haberlo fichado del Benfica por 35.
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