El balón parado les trae de cabeza





El Real Madrid ha comenzado la temporada con un problema defensivo que se traduce en dos palabras: balón parado. Los hombres de Bernd Schuster han recibido en los dos primeros partidos de la temporada liguera un total de 5 goles, de los cuales, 4 han sido a balón parado.

Comenzó la faena en La Coruña. Allí, Mista primero y Lopo, después, cabecearon a la red de Casillas tras sendos saques de esquina del cuadro gallego, comenzaba así el dolor de cabeza para los madridistas con el balón parado de por medio.

Sin embargo, la situación se agudizó el pasado domingo donde dos de los tres goles conseguidos por el Numancia fueron a balon parado. En el primero de ellos, tras un saque de esquina botado por Barkero, Moreno, libre de marca en el segundo palo, conseguía el primer tanto del cuadro soriano. Posteriormente fue Moreno el que transformó desde la frontal del área un tiro libre directo que superó la barrera y sorprendió a Casillas, que no pudo atajar el balón.

A buen seguro que a Schuster no le gustó recibir estos tantos, más si cabe, cuando se tiró gran parte del entrenamiento a puerta cerrada del sábado preparando, precisamente, el antídoto para dichas jugadas de estrategia del cuadro de Sergio Kresic.