Con el horno todavía caliente de los 8 goles cocinados ante el Deportivo de la Coruña, en lo que fue la mayor goleada de la historia blanca a domicilio en competición liguera, tres días después el Real Madrid se enfrentará ante el club al que le concedió el mayor castigo hasta la fecha, el Elche.
Y es que el conjunto ilicitano tiene el fausto recuerdo de aquel 7 de febrero de 1960, el año de la Quinta, en el que los de Chamartín les golearon por la friolera de 11-2, con 5 goles de un futbolista que no disfrutó de muchos partidos con la camiseta blanca, pero que estuvo en el encuentro perfecto por la baja de Don Alfredo Di Stefano en aquel día bajo la nieve, Pepillo.
Además, el legendario Ferenc Puskas se encargó de anotar otros 4 tantos en una noche histórica y que 54 años después sigue manteniéndose como el día más goleador de la historia del club. El Elche de 2014, llega casi en los mismos pañales que entonces –debutaba en primera-, pero con una ilusión rebosante que seguro no le pondrá las cosas tan fáciles a los de Ancelotti.
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