A principios del pasado mes de octubre una expedición madridista viajó a Marruecos para comprobar en persona algunos aspectos de la organización del campeonato. Y uno de los asuntos que más preocupó fue el estado del césped de los estadios donde el Real Madrid se entrenará y jugará sus dos partidos. Especialmente llamativa fue la situación de los estadios Moulay Abdellah y Moulay El Hassan. En el primero el Real Madrid tendrá que disputar su duelo de semifinales, si bien previamente se habrán jugado otros tres choques en su ya debilitado césped, mientras que en el segundo la plantilla se entrenará durante su estancia de varios días en Rabat.
Hace un mes el estado de estos dos campos era bastante malo y la situación no ha cambiado en estas semanas a pesar de que el Real Madrid hizo llegar a la organización su malestar por este asunto. El tiempo corre en contra del equipo blanco, aunque según informa el diario 'AS' el club ya ha encargado a su jardinero jefe, el británico Paul Burguess, que supervise todos los trabajos que se realicen en los próximos días en estos dos estadios, de forma que al menos ambos presenten un estado que no haga peligrar la salud de las estrellas madridistas. Pero aún así la tarea parece bastante titánica, toda vez que por Rabat pasarán seis de los siete conjuntos participantes, lo que contribuirá a desgastar la hierba natural de los dos terrenos de juego. Motivo más que suficiente para que el Real Madrid este en sobre aviso sobre lo que se encontrará en esta sede del torneo.
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