Clos, ¿desde cuándo agarrar de la camiseta no es falta?

El colegiado se dejó engañar por Raúl García en la jugada que decidió el partido





Ya empieza a ser tradición que cada vez que el Real Madrid juega en el Calderón tenga que aguantar un concierto de patadas y golpes sin venir mucho a cuento. Y este miércoles no fue una excepción, porque jugadores como James Rodríguez o Isco se llevaron una colección de moratones del estadio rojiblanco. Especialmente dura fue una acción de Mario Suárez sobre el colombiano en la primera parte que no mereció ni tarjeta amarilla. Además, unos minutos antes Raúl García le había soltado sin balón en juego un pequeño bofetón a Khedira que Clos tampoco había querido ver. Al parecer, el trencilla no estaba por la labor de complicarse la vida y echarse encima al público rojiblanco.

Patada de Mario Suárez a James

Aunque lo peor estaba por llegar en la segunda parte. El mosqueo del madridismo fue en aumento cuando el juez de línea anuló por fuera de juego una acción en la que James se plantaba prácticamente solo ante Oblak. La repetición de la jugada demostró que el mediapunta estaba claramente en línea. Pudo haber sido el 0-1, pero el partido pasó a ser un 1-0 cuando el aragonés señaló un penalti de Ramos sobre Raúl García. La jugada fue muy aparatosa y el colegiado picó claramente, pero la realidad es que Raúl García se cachondeó de todo el mundo.

Fuera de juego inexistente de James en el Vicente Calderón

En el comienzo de la jugada se ve cómo el navarro agarra claramente a Ramos en la pugna por el balón. Tal fue el 'tirón' de la camiseta que desequilibró al sevillano, a quien no se le ocurrió otra cosa que agarrar por el hombre a su rival para hacerle caer con él. El sevillano estuvo poco hábil en la acción y cayó en la trampa de su rival, siendo una simple víctima de la marrullería del futbolista atlético. Y es que no cabe duda de que hubo falta por su parte, pero provocada por un agarrón anterior sobre él de Raúl García.

Para esas alturas el partido ya estaba condicionado totalmente. Estos claros errores terminaron de sacar al Madrid del choque y Arbeloa cometió el error de caer en el juego atlético al realizar una fea entrada sobre Gabi. Fue el único error de Clos que favoreció a los visitantes. Aunque para esas alturas ya carecía de mucha importancia, porque el gran perjudicado había sido el equipo merengue. Un clara ocasión de gol anulada, rojas a Mario Suárez y Raúl García perdonadas y un penalti pitado que no era. Tres acciones que marcaron el sino del encuentro y que dejan al Madrid de Ancelotti en la cuerda floja.