¿Está Villar tras la última denuncia a Zidane?

'El Confidencial' asegura que uno sus 'fieles' ha impulsado esta acusación





El francés ha sido denunciado por segunda vez por entrenar al Castilla sin tener el título español que le da derecho. A finales del año pasado ya vivió una experiencia similar al ser denunciado por Miguel Galán, director de Cenafe Escuelas, aunque en aquella ocasión el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) otorgó la suspensión cautelar al galo tras haber sido inicialmente sancionado con tres meses de inhabilitación. Y ahora, cerca de tres meses después ha sido el entrenador asturiano Gerardo Fraile el que ha decidido recurrir a la vía contencioso-administrativa para acusar a Zidane Zidane, siendo su denuncia aceptada por parte del Juzgado Nº5 de Madrid.

El problema es que en esta denuncia las cosas no son tan sencillas como parecen, pues el propio Fraile reconoció en palabras para 'As' que tiene el apoyo y el respaldo de la Federación Asturiana de Fútbol, la cual está a cargo de Maximino Martínez. Este hombre es conocido por ser uno de los grandes 'fieles' de la política de Villar, quien además, por cierto, ya ha dejado claro que no le gustó nada que el TAD decidiera supender cautelarmente el castigo al técnico madridista; algo de lo que incluso acusa al Consejo Superior de Deportes (CSD), aunque este no tiene potestad real sobre este tribunal.

De hecho 'El Confidencial' afirma que estas falsas acusaciones han ido más lejos en los últimos días, ya que el propio Maximiliano Martínez habría llegado a preguntar en una reciente reunión sobre la violencia en el fútbol español si "¿Lo de Zidane y el TAD no es violencia?". Así, este medio apunta a que la denuncia a Zidane podría venir orquestada desde las altas instancias de la Federación, aunque aparentemente parezca que es una simple queja de un técnico asturiano. En las últimas semanas Florentino ha estado visiblemente molesto con Villar por su oposición a la aprobación del Real Decreto para la venta colectiva de los derechos del fútbol, por lo que estos nuevos movimientos para perjudicar a Zidane y al Real Madrid podrían ser la gota que colme el vaso de la paciencia merengue en sus relaciones con la RFEF.