El 'submarino amarillo' hizo anoche un partidazo en el estadio madridista, pero también llevó el juego al límite en las áreas. Los futbolistas del Villarreal emplearon piernas, brazos y manos para frenar los ataques de su rival, en ocasiones de forma flagrante. Hasta tres claros penaltis hubo anoche en el área amarilla, aunque el colegiado solo tuvo el valor de pitar el más claro, el que le hizo Eric a Cristiano Ronaldo. Pero hubo otros dos, uno en la primera parte sobre Bale y otro cuando el partido estaba ya en el minuto 86 y los blancos buscaban el gol de la victoria a la desesperada.
En la primera acción el galés fue agarrado de un brazo por Cisma durante el lanzamiento de un córner. El tirón fue tan fuerte que impidió al futbolista llegar al balón que iba por el aire a pesar de que no estaba pasando muy por encima de su cabeza. Ni el árbitro ni su juez de línea lo vieron, o al menos hicieron como que no había pasado nada a pesar de que Bale se quejó ostensiblemente.
Posteriormente, en el minuto 86 llegó la 'traca final' de González González. Chicharito se internó en el área tras un buen pase interior y ya se disponía a encarar a Sergio Asenjo desde una posición algo escorada cuando Eric - otra vez él - le dio un pequeño empujón por la espalda. El gesto fue lo suficientemente perceptible para desequilibrar al mexicano, pues por pura física cuando un jugador va en carrera es mucho más fácil que caiga si recibe un empujón. Todo el Bernabéu pidió la pena máxima y la expulsión del jugador del Villarreal por segunda amarilla, pero el trencilla volvió a 'taparse' los ojos ante la incredulidad del respetable (si no puede ver la jugada en el siguiente vídeo puede acceder a él desde este enlace).
Fueron dos lances concretos en un partido en el que Moi Gómez también se mereció la tarjeta roja en la primera parte. El valenciano desvió claramente con la mano un peligroso centro de Carvajal desde la derecha. González González señaló la infracción, pero no le mostró la tarjeta que se había ganado por cortar una acción de riesgo para su portería. Poco después vería una amarilla por una falta en el centro del campo, así que siendo justos debería haber sido expulsado en ese momento. Otro importante error que sumar a la lista de este colegiado - dos penaltis y dos rojas escamoteadas - y al 'mosqueo' del madridismo tras el arbitraje visto la semana pasada ante el Elche. ¿Casualidad que estos dos pésimas actuaciones se hayan producido justo cuando el Madrid podía coger algunos puntos más de ventaja respecto al Barcelona?
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