A día de hoy se puede decir que el conjunto de Ancelotti se jugará media temporada entre los próximos 2 y 13 de mayo. Entre estos días el equipo tendrá que jugar en el Sánchez Pizjuán de Sevilla (sábado 2 de mayo), a domicilio ante la Juventus (martes 5 de mayo), en casa ante el Valencia (sábado 9 de mayo) y también en el Bernabéu contra el campeón italiano (miércoles 13 de mayo). En consecuencia afrontará sus cuatro partidos más complicados de lo que le queda de temporada - sin contar una hipotética final de Champions - en un plazo de 11 días, siendo dos de ellos en su estadio y dos a domicilio.
Mientras tanto el Barcelona tendrá algo más fácil su calendario, al menos en lo que respecta a la exigencia de sus partidos de Liga. El sábado 2 de mayo visitará el estadio del Córdoba y el miércoles 6 de mayo recibirá al Bayern de Múnich. Más tarde, el sábado 9, jugará en el Camp Nou ante la Real Sociedad, para acabar su trayectoria en estas semanas jugando en Múnich el martes 12 de mayo. Así pues, aunque no cabe duda de que el Bayern exigirá mucho a los de Luis Enrique, el hecho de jugar ante equipos claramente inferiores en la Liga probablemente les permita gestionar mejor sus recursos que Carlo Ancelotti, quien no podrá dar mucho descanso a sus mejores futbolistas ante la dificultad de los compromisos que se le presentan.
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