El FC Barcelona no falló en Cornellá, donde dominó el encuentro desde el primer minuto ante un Espanyol blando, sin ideas y que nunca generó peligro contra la meta culé. De hecho, no sería hasta avanzada la segunda mitad, y ya con el Barcelona con un jugador menos, cuando los pericos dispararon por primera vez entre los tres palos, prueba del mal día que tuvieron los de Sergio González. Pero vayamos por partes...
El encuentro comenzó cuesta abajo para el Barcelona, que dominaba el cuero y se aprovechaba de la debilidad defensiva de los locales para hacer daño. Así, pronto llegaría el primer tanto del encuentro, obra de Neymar. Casi sin tiempo para reaccionar, los azulgrana harían el 0-2 al borde del descanso por mediación de Messi y con un clarísimo fuera de juego incluido. Mateu dejó seguir la jugada y al final de la primera parte, el derbi estaba decidido.
Podría haber sido otra historia con 0-1, especialmente cuando Jordi Alba fue expulsado con roja directa por una falta de respeto a Mateu Lahoz después de ver una amarilla. Pero el Espanyol generó, a pesar de estar con un hombre más, muy poco peligro. Claudio Bravo se quitó de encima los pocos apuros que tuvo el conjunto de Luis Enrique, que al final vería cómo el Espanyol se quedaba también con 10 por la expulsión de Moreno. El Real Madrid tendrá que ganar este domingo al Celta para mantener viva la pelea por el título de Liga.
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