Cuatro victorias y un empate, el del Vicente Calderón en los cuartos de final, era el balance del Real Madrid en sus partidos fuera de casa de esta edición de la Liga de Campeones. El equipo blanco había mostrado hasta este martes una enorme solidez, encajando apenas un gol fuera del Bernabéu en la fase de grupos y solventando las diversas eliminatorias con un cerrojo en cada partido disputado a domicilio.
El Real Madrid comenzó la temporada europea lejos del Bernabéu ante el Ludogorets, en Bulgaria. Los blancos vencieron por 1-2, encajando ese día el único gol a domicilio de toda la Champions. Posteriormente, el equipo de Ancelotti dio un recital en Anfield goleando al Liverpool por 0-3 en el que fue su mejor momento de la temporada. La victoria por la mínima ante el Basilea, 0-1, puso la guinda a una gran fase de grupos.
Posteriormente, en las eliminatorias, el Schalke 04 sucumbió ante el poderío del Real Madrid, que venció por 0-2 y solventó en Alemania el pase a cuartos a pesar de las complicaciones de la vuelta en el Bernabéu. La visita al Atlético en el derbi del Calderón fue el único empate cosechado por el conjunto merengue, sin goles, hasta la derrota de este martes en el Juventus Stadium, donde el Real Madrid ha dejado abierto el pase a la final de Berlín.
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