Dos problemas principales tuvo el Real Madrid en Turín: errores defensivos individuales y distancia entre líneas a la hora de presionar. El equipo madridista quiso ahogar la salida de balón italiana, pero la presión no fue la correcta. Pirlo y los mediocampistas de la Juventus recibían entre líneas con demasiada facilidad y Carlos Tévez disfrutó, y de lo lindo, con los espacios que dejaba el Madrid.
Si el equipo madridista quiere ganar a la Juventus, deberá corregir ciertos aspectos. Más allá de realizar la presión con corrección, los errores defensivos deberían desaparecer. No es habitual ver como jugadores de la talla de Pepe, Varane o Sergio Ramos, cometan graves errores individuales, errores que pueden condicionar una eliminatoria en cualquier instante.
Con un Bernabéu ‘enchufado’, con el Madrid concentrado y junto, ganarle a la Juventus no debería ser muy complicado. La ‘pizarra’ de Ancelotti funcionará esta semana para encontrar el equilibrio perdido en Turín y, así, tener todas las opciones de estar en la próxima final de la Liga de Campeones.
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