El Real Madrid decidió lanzarse inmediatamente a por la contratación del brasileño tras la conformación de Sami Khedira de que no iba a renovar su contrato. El alemán confesó en diciembre sus planes a la Junta Directiva y a Carlo Ancelotti, por lo que estos decidieron mover ficha y hacerse con los servicios del prometedor Lucas Silva. Sin embargo, posteriormente no se dieron las circunstancias para que el nuevo jugador adquiriera un papel relevante en el Real Madrid, por lo que ahora su futuro está claramente en duda.
Lógicamente el equipo blanco sigue contando con él, ya que el club decidió invertir 15 millones en su fichaje porque lo veía como uno de los grandes talentos del fútbol sudamericano. Pero ahora la gran duda es cuál será el siguiente movimiento en relación al futbolista, ya que a día de hoy parece complicado que Lucas Silva se haga con un sitio en la plantilla sin tener minutos y regularidad en su juego.
De hecho, su caso se parece mucho al de su compatriota Casemiro, quien la pasada temporada no pudo demostrar su calidad y acabó siendo cedido al Oporto, donde esta campaña se ha ganado volver a Chamartín. Por eso el próximo entrenador merengue deberá valorar la opción de ceder a Lucas nada más aterrizar en Valdebebas, ya que es una fórmula que con otras jóvenes promesas del club ha funcionado bastante bien y que, en su caso, podría ayudarle a coger la experiencia en el fútbol europeo que le falta a día de hoy.
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