Las vacaciones no son prioritarias todavía para Karim Benzema, que antes de marcharse a pasar unas semanas de descanso tras una larga temporada ha decidido seguir la recomendación de Zinedine Zidane y marcharse al Tirol italiano para tratarse en el centro clínico y dietético Merano. Se trata de una clínica en la que el francés fortalecerá los músculos de su rodilla tras sufrir un esguince ante el Atlético en Champions y recaer hace unos días ante el Espanyol en la penúltima jornada del campeonato nacional de Liga.
El delantero del Real Madrid no podrá jugar los dos amistosos que disputará Francia ante Bélgica y Albania los días 7 y 13 de junio, y ha decidido que hasta entonces no se marchará de vacaciones y aprovechará estos días para recuperarse de su lesión y afrontar así las vacaciones sin preocupaciones. Benzema sabe que el Real Madrid tiene la intención de fichar un delantero que le haga la competencia de cara al curso que viene y por eso quiere estar en las mejores condiciones para poder competir de igual a igual con el futbolista que llegue. Además de tratarse la rodilla, Benzema se someterá a una estricta dieta diseñada por Henri Chenot para llegar lo más esbelto posible a la pretemporada en julio.
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