Tras disputar 2700 minutos el pasado año, 30 partidos completos, con una sobriedad y destreza bajo los palos magnífica, Rubén ha tenido hoy la oportunidad de vestirse con la camiseta merengue por primera vez. Un sueño para todo canterano, y en especial, para un portero, que en los últimos años se ha fijado en la figura de Iker Casillas para progresar y quemando etapas en la cantera blanca.
Los especialistas en ‘La Fábrica’ merengue insisten en la calidad de Yáñez. Le colocan a la altura de los grandes porteros madridistas por calidad, carisma, progresión y ganas de trabajar. Rubén tiene un gran uno contra uno, mucha personalidad y le sobra madridismo. En su debut, gracias al gran trabajo de todo el equipo, el Valerenga apenas le ha dado trabajo. A buen seguro, que en próximas fechas, a Yáñez le dará tiempo de demostrarle al madridismo su calidad más que sobrada.
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