El antecedente más reciente fue la eliminatoria de la previa de la Champions del verano de 2014. El Nápoles, equipo al que dirigía el técnico madrileño, visitaba 'La Catedral' para intentar pasar a la fase final de la Liga de Campeones y cayeron derrotados por un contundente 3-1 que le daba a los vascos la posibilidad de jugar la mejor competición de clubes del mundo y que dejaba a los italianos en la Europa League.
13 meses después, Rafa Benítez vuelve a San Mamés con ganas de revancha. Esta vez al frente de una plantilla de ensueño y con los mejores jugadores del mundo, pero el campo del Athletic siempre ha sido muy complicado para el Real Madrid y una de las salidas más difíciles de la temporada para los blancos a lo largo de la historia.
También para el entrenador blanco es un campo que se le resiste. Además de con el Nápoles, se ha sentado en el banquillo de San Mamés en otras 6 ocasiones. Con Valladolid, Extremadura y Valencia y tan solo ha sido capaz de sacar tres empates, el resto todo derrotas.
El de mañana es un buen partido para que los blancos den un golpe encima de la mesa. Es el choque más difícil en lo que llevan de temporada y es un escenario idóneo para demostrar que el Real Madrid va a ser un equipo competitivo en los encuentros más exigentes. 15 días después tocará visitar el Calderón, pero eso es otra historia.
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