El Real Madrid ha sido fiel a su tradición de marcar al menos un gol en todos los partidos de la Liga de Campeones que disputa, al menos en los últimos años. Y es que desde que en la temporada 2013/14 perdiese ante el Borussia Dortmund por 2-0 en la vuelta de los cuartos de final, ha marcado en todos los encuentros, excepto en uno.
Desde aquella noche angustiosa en Dortmund, donde a pesar del sufrimiento se logró el pase a semifinales, siempre que el Real Madrid ha jugado un partido de Liga de Campeones ha marcado al menos un gol, eso sí, con la excepción que tiene toda regla. Fue la temporada pasada, ante el Atlético de Madrid, con el que se empató sin goles en el Vicente Calderón, aunque luego se les ganó por 1-0 en el Santiago Bernabéu.
Este miércoles, en la primera visita del Real Madrid a tierras suecas para disputar un partido oficial, el equipo ha cumplido con su tradición y ha vuelto a perforar la portería rival, en este caso la del Malmö. El próximo envite del club blanco en la Liga de Campeones será ante el París Saint-Germain, ante el que será vital mantener la costumbre del gol merengue.
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