Sin ir más lejos, Varane todavía siente como casi un ‘insulto’ la ridícula tarjeta amarilla que recibió el pasado domingo en el Vicente Calderón. El central madridista ni siquiera tocó al jugador atlético y Undiano Mallenco decidió mostrarle tarjeta amarilla. Para más inri, el Comité de Competición le ha mantenido la amarilla.
Son ya tres tarjetas las recibidas por Varane. Apenas ha cometido siete faltas, un número muy escaso para un central. La media es de apenas una falta por jornada. Una cifra ridícula pero que los árbitros quieren ‘afear’ a base de tarjetas. Ni el propio Varane entiende la actitud de los árbitros en este comienzo de temporada.
El Real Madrid tiene muy claro que esta temporada tocará convivir con ello. Desde el estamento arbitral no se quiere dar la impresión de que se le tolera todo al Madrid y le buscarán las ‘cosquillas’ a los blancos a la mínima. Varane está siendo la primera víctima, y eso que es uno de los centrales más limpios del fútbol europeo.
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