El 'Clásico' se jugará dentro de 19 días, por lo que Messi ya tendría que estar trotando sobre el césped en los entrenamientos. Sin embargo, el argentino sigue pasando sus horas de rehabilitación en el gimnasio, ya que su rodilla lesionada aún no ha ganado la fuerza y la seguridad como para ser sometida a ejercicios sobre el terreno de juego. De ahí que la intención de los servicios médicos del Barcelona sea que el jugador dedique toda esta semana a ejercitar su articulación, con la intención de que en aproximadamente siete días pueda calzarse las botas para empezar a correr.
Esto significa que los plazos han acabado 'devorando' las opciones del delantero de estar en el Santiago Bernabéu. Tras caer lesionado - con una rotura del ligamento colateral de la rodilla izquierda - ante Las Palmas el diagnóstico fue de siete u ocho semanas, pero el mismo ha resultado a ser demasiado optimista. La ilusión del barcelonismo era que su 'crack' jugara ante el Real Madrid, pero su salud es lo primero y en el club saben que no van a poder arriesgar con él. Ahora el objetivo es que Messi pueda reaparecer antes de acabar este mes de noviembre, o a lo sumo a principios de diciembre, por lo que no les queda otra que resignarse ante la idea de afrontar el 'partido de partidos' con su equipo claramente debilitado.
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