El Sánchez Pizjuán es el último obstáculo del Real Madrid para llegar arrasando al parón internacional y al Clásico del próximo 21 de noviembre ante el FC Barcelona. Los blancos, que disfrutaron de una semana completa sin partidos hasta el pasado sábado, se habían impuesto a sí mismos el reto de ganar los tres encuentros de la semana antes del parón, y de momento las cosas no podrían ir mejor: triunfo a medio gas ante Las Palmas e importantísima victoria ante el PSG.
Los blancos siguen líderes en España y en Europa, permanecen invictos y siguen dando la misma sensación de solidez. Y ya sólo queda la visita al Pizjuán para intentar cerrar la semana con sobresaliente. Los blancos tendrán que visitar al Sevilla el próximo domingo y lo harán con la moral por las nubes después de haber demostrado ante el PSG que son capaces de tumbar a los grandes de Europa, algo que muchos dudaban de este Real Madrid.
Las dos victorias conseguidas permiten afrontar con total calma el choque ante el Sevilla, aunque también con la certeza de que no se puede fallar para llegar en cabeza al Clásico. El parón internacional marcará cómo lleguen los blancos y los culés al encuentro del 21-N, pero de momento el Real Madrid quiere marcharse con una sonrisa y manteniendo la primera posición de la Liga que se han ganado a pulso, al igual que en Europa.
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