A los de Laurent Blanc no le quedaba más que ganar y esperar un pinchazo del Real Madrid en Ucrania, pinchazo que nunca llegó. El equipo galo se adueñó muy pronto del choque con dos goles en sus dos primeros disparos. Primero Rabiot a pase de Van Der Wiel, a los tres minutos del comienzo del partido y 11 minutos después, en el 14, Di María sentenciaba el choque colocando el 0-2 en el marcador.
A partir de ahí el PSG se limitó a mantener el control del partido ante un Malmö que nunca puso ninguna oposición. Apenas un par de disparos que fueron fácilmente solventados por Kevin Trapp. El PSG sumó alguna oportunidad para ampliar el marcador antes del descanso, pero no fue hasta la segunda parte cuando el conjunto francés amplió su ventaja.
Nada más reanudarse el partido, el PSG volvía a golpear al Malmö. En esta ocasión fue Ibrahimovic, el hijo pródigo que regresaba a casa, el que marcó el 0-3 tras otro pase de Matuidi y al filo del minuto 70, de nuevo Ángel di María batía la portería de Willand. La goleada la culminó Lucas Moura en el minuto 82 anotando el 0-5. A pesar de la victoria, el PSG se tendrá que conformar que ser segundos de grupo.
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