Y es que los blancos suman ya cuatro jornadas del campeonato doméstico sin conseguir dejar su portería a cero. Desde el encuentro ante el Levante en el Santiago Bernabéu el pasado 17 de octubre, todos los equipos que se han enfrentado a los de Chamartín han anotado, al menos, un gol, algo que se ha visto reflejado en el devenir del equipo.
Un gol de Las Palmas, otro del Celta, tres del Sevilla, en lo que fue la primera derrota de la temporada para el Real Madrid, y cuatro en el encuentro ante el Barça. Nueve tantos en cuatro partidos, cuando en los otros ocho partidos de Liga, tan solo habían encajado dos goles. Uno en San Mamés, contra el Athletic, y otro en el Calderón, en el derbi del pasado 4 de octubre.
El Real Madrid necesita volver a recuperar su solidez defensiva. Con la pegada que tiene Real Madrid es muy importante ser firmes atrás. Parecía que Rafa Benítez había conseguido mejorar, y mucho, esta faceta del equipo, pero en el último mes han vuelto a salir a la luz los defectos del pasado año. Esperemos que contra el Eibar, Keyor Navas vuelva a presumir de dejar su puerta a cero.
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