"Bale quiere irse porque han echado a Benítez", decían. Pues hat trick que te crió. El galés hizo uno de sus mejores partidos de la temporada en el estreno de Zidane en el banquillo y demostró que sigue enchufado con el equipo. Además, sus tres goles tuvieron doble premio, ya que consiguió superar la cifra redonda de los 50 goles con el Real Madrid.
Primero hizo el segundo de la noche con un gran cabezazo a centro de Carvajal. Posteriormente, ya en la segunda mitad, hizo el 3-0 con un zurdazo soberbio a pase de Cristiano Ronaldo desde la derecha. Ése fue el tanto con el que alcanzó el medio centenar de goles con el equipo blanco en partido oficial, desde que marcara el primero también a pase del pepinero en su debut en El Madrigal en 2013.
Más tarde, y antes de que Zidane le sustituyera y recibiera una de las mayores ovaciones desde que es futbolista merengue, puso la guinda a su hat trick con otro gol con la cabeza tras un saque de esquina. Actuación perfecta de un Bale que, además, generó ocasiones y ayudó en tareas defensivas. Un partido redondo para un galés que se lleva el balón del debut de Zidane a su casa. Más que merecido premio para él.
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