Zidane no pudo contar en el entrenamiento de este miércoles con el guardameta, Kiko Casilla, con el crack blanco, Cristiano Ronaldo y sólo una parte con el capitán, Sergio Ramos, que sigue con su proceso de recuperación, aunque parece que sí podría llegar a jugar ante el Betis. A estos tres jugadores, que trabajaron en el interior de las instalaciones, se unió la baja de Gareth Bale, que sufrió una lesión en el sóleo el pasado domingo contra el Sporting y que le tendrá algunas semanas apartado de los terrenos de juego.
Los jugadores comenzaron la sesión con un circuito físico que duró algo más de 40 minutos, que combinó el gimnasio y el césped. Zidane lo viene comentando a las ruedas de prensa, al equipo le falta mucho a nivel físico y el francés, aprovechando que no hay partidos entre semana, está realizando entrenamientos con una alta carga física. Posteriormente, y ya con el balón, los jugadores completaron diversos ejercicios de posesión de balón y simulaciones de partido en campo de dimensiones reducidas de dos contra dos.
Para suplir las bajas de los cuatro jugadores que no se ejercitaron con el resto del grupo, Zidane citó hasta cinco jugadores del filial que formaron parte del primer equipo en el día de hoy. Álvaro, Marcos Llorente, Odegaard, estos más habituales, Carlos Abad y Herrero, completaron la nómina de jugadores en el entrenamiento de este miércoles.
Fuente de las imágenes: realmadrid.com
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