Cristiano Ronaldo lidera una nueva paliza merengue

El portugués, con tres goles, fue el faro anotador de un Real Madrid que hizo una gran primera parte.





Y es que llegar tarde a las butacas del estadio del Real Madrid empieza a ser sinónimo de perderse goles. Muchos goles. Si ante el Sporting el recital empezaba pronto, ante el Espanyol la cosa no le iba a ir a la zaga. De hecho, 15 minutos después de que Hernández Hernández diera comienzo al partido el resultado ya era de 3-0 a favor del conjunto merengue.

Salida eléctrica del Real Madrid

El Madrid salió en modo avión desde que sacó desde el centro del campo. Y no es una frase hecha puesto que durante el primer minuto de encuentro el Espanyol no tocó el balón y el Madrid estuvo cerca de abrir la lata tras una jugada de toque y combinaciones que terminó con un remate alto de Marcelo.

Tras ese aviso y uno posterior a la media vuelta de Cristiano Ronaldo empezó el recital goleador. Primero iba a ser Karim Benzema, con un remate de cabeza, el que abriría la lata tras un centro medido de James desde la derecha. Sin tiempo para asimilar el mazazo, el Espanyol recibiría un segundo golpe en forma de gol después de un penalti sobre Cristiano Ronaldo cometido por Roco. El portugués del Real Madrid no iba a perdonar lanzando a su lado de seguridad, es decir, a la mano derecha del portero por bajo.


James se unió a la fiesta

Después de 11 minutos y con el 2-0 en el marcador ni el más valiente de los apostantes se atrevía a pronosticar si quiera que el Real Madrid no ganaría con contundencia el partido. Y más aun después de ver que a los 15’ James Rodríguez pondría el tercero de la noche con un remate desde fuera del área que tocó en un zaguero visitante y acabó estampándose en la red del Bernabéu.

Tras dejar K.O a su oponente a base goles, el Madrid no se dejó llevar por el viento del partido. Siguió luchando y peleando. Ver a jugadores como Cristiano, James o Isco pelear balones con el partido prácticamente resuelto levantó al Bernabéu de sus asientos en más de una ocasión. Por si esto fuera poco, Cristiano Ronaldo tenía guardado para el último minuto de la primera parte una de esas jugadas que se recordarán durante toda la temporada, un doble desequilibrio dejando atrás a dos rivales y que finalizó con un latigazo impecable con la pierna izquierda. Todo un golazo para cerrar una primera parte colosal.

Zidane movió el banquillo

Ficha técnica

Real Madrid 6: Navas; Carvajal, Varane, Ramos, Marcelo; Kroos (Casemiro 70’), Modric (Jesé 58’), Isco; Cristiano, Benzema (Lucas 74’), James

Espanyol 0: Arlauskis, Javi López, Álvaro (Fuentes 46’), E. Roco, R. Duarte, Diop, Víctor S. (Abraham 56’), Jordán, Salva (J.López 46’), Hernán Pérez y Mamadou

Goles: 1-0 Benzema (7’), 2-0 Cristiano (p.11’), 3-0 James (15’), 4-0 Cristiano (45’), 5-0 Cristiano (82’), 6-0 Duarte (p.p 85’)

Árbitro: Hernández Hernández. Amonestó a Hernán Pérez, Diop, Mamadou, Álvaro, Casemiro

Estadio: Santiago Bernabéu.

Después de 45 minutos en los que el Real Madrid volvió a ofrecer su mejor cara, la segunda parte se convirtió en un mero trámite que había que pasar sin que ninguna lesión pudiera hacer torcer el gesto a cualquiera de los madridistas.

Zidane tenía claro que debía ir dando entrada de forma paulatina a jugadores como Jesé, Casemiro o Lucas para que también fueran entrando en dinámica. Ninguno de ellos es titular indiscutible, pero todos pueden terminar siendo más que importantes en la recta final de la competición, de ahí que Zidane quisiera darles ‘bola’ en un partido ya decidido.

Buenos minutos de Jesé

La recta final del partido iba a encumbrar precisamente a uno de esos tres cambios. Jesé Rodríguez sería protagonista de los dos goles finales con los que el Real Madrid cerraría el partido. En el primero le dio una gran asistencia a Cristiano Ronaldo para que el luso empujara su ‘hat trick’. Y en el segundo volvería a colarse por la banda izquierda para forzar que Duarte metiera la pierna a un centro suyo que acabaría dentro de la meta visitante.

El Madrid tuvo un domingo plácido, como los últimos partidos en casa con Zidane bajo el mando. Y es que desde que el galo se hizo con las riendas del equipo blanco el Real Madrid ha marcado 16 goles en tres partidos en casa, ahora queda por ver que esas buenas sensaciones se traduzcan también en victorias fuera de casa. El próximo domingo, en Granada, nueva prueba para demostrar poderío…e intentar remontar puntos por la Liga.