En los dos años y medio que lleva en el Real Madrid el galés ha dejado claro que es un futbolista especial en el plano físico. Tiene cierta propensión a lesionarse y su tolerancia al dolor es bastante baja, por lo que sus recuperaciones suelen ser más largas que en otros futbolistas. Así, como destaca 'Marca' el futbolista ya se ha lesionado en 10 ocasiones desde que está en la capital de España, lo que le ha obligado a ausentarse en 29 partidos y le ha mantenido en la enfermería durante 189 días - en torno a seis meses en total -. Es decir, que el jugador se ha pasado lesionado la quinta parte del tiempo que lleva en el club.
A día de hoy está claro que Bale no podrá jugar el próximo 17 de febrero ante la Roma. De hecho, nadie puede asegurar que esté listo para estar ante el Atlético de Madrid diez días después. En el club no quieren ponerse fechas para no generar ansiedad en el futbolista y en su entorno, lo que podría perjudicarle. En el horizonte está el duelo de vuelta de Champions ante la Roma del día 8 de marzo, pero este queda tan lejano que en el Madrid todavía no se plantean si podrá ayudar en ese choque.
Mientras tanto Zidane se mantiene como espectador. El francés no está precisamente contento por la gestión que el equipo médico ha hecho de la lesión, ya que es evidente que el diagnóstico no fue todo lo preciso que cabría esperar. Por eso prefiere mantenerse al margen a la espera de que el jugador le acabe dando el 'OK' cuando se sienta recuperado. Hasta entonces prefiere no hacerse ilusiones y plantear los encuentros sin tener en mente a Gareth. Su deseo expreso es que el futbolista se recupere totalmente y vuelva cuando tenga 'riesgo 0' de recaída, por lo que está dispuesto a esperar el tiempo que sea necesario.
DEJA TU COMENTARIO