Según informa el diario El País, el Manchester United y José Mourinho firmaron un precontrato hace unos meses donde el técnico luso, consciente de que su fichaje podía ser rechazado por leyendas del conjunto inglés, incluyó una cláusula en la que si finalmente no se realizaba la operación antes del 1 de mayo los de Old Trafford tendrían que abonarle 6,5 millones de euros y si el 1 de junio todavía sigue sin ser oficial, el United le pagaría 13 millones más.
Al parecer ni Bobby Charlton ni Sir Alex Ferguson quieren a José Mourinho y preferirían optar por otro técnico. Se ha barajado la posibilidad de que fuera el propio Ryan Giggs, ayudante de Van Gaal, el que remplace al holandés como entrenador de los 'red devils', pero de momento son todo especulaciones.
Conforme va avanzando la temporada cada vez parece menos probable que José Mourinho termine sentado en el banquillo de Old Trafford. A pesar de que es del agrado de la directiva del conjunto británico, el técnico portugués no tiene el beneplácito de dos voces autorizadas dentro del Manchester United.
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